sábado, 24 de octubre de 2009

Una ciudad de contrastes.


Esta es la vista de Luanda desde una Fortaleza colonial de un par de siglos quizás, de lo poco que queda tras la guerra; en esta ciudad, construida para 600.000 habitantes y que actualmente aloja a unos 6.000.000 tras los movimientos poblacionales durante la guerra, se entremezclan algún nuevo edificio que podría ubicarse en cualquier metrópolis actual por su modernidad y tecnología, con los barrios de chabolas y casas de autoconstrucción, sin agua ni luz corriente lógicamente.

Ayer pude callejear más, salimos a las 14 de la oficina los viernes y para no coger tráfico, más del habitual por la lluvia, decidimos quedarnos en el centro ya que a la tarde también teníamos la inauguración de una sala de arte.

La verdad que hasta ahora siempre hay algún evento cultural, comida o fiesta a la que asistir, no me voy a quejar, pero también el nivel diario de sobredosis de gente, caos, tráfico, ruina, etc., es agotador; llevo una mañanita relajado, desayunando, nadando, leyendo, un poco solo y sin necesidad de encontrarme con nadie por ahora, y me apetece, hasta en Luanda las personas necesitan su propio espacio para desconectar, y aquí es un poco complicado también, pues los medios no son los que desearíamos a veces.

Buen fin de semana, disfruten la vida.

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